Tal y como explican desde el proyecto Amigables con el Alzheimer, hablamos de un entorno amigable cuando no solo se contribuye a la integración de los pacientes, sus cuidadores y familia, también se trata de aquel que promueve la visibilidad y dignificación de dicho colectivo, responde de manera flexible e incluso se anticipa a las necesidades de la persona que convive con el Alzheimer o cualquier otro tipo de demencia, se adapta físicamente a su situación actual y establece una buena relación con el paciente.
Aunque parezca un elemento que carece de importancia, lo cierto es que diseñar un ambiente óptimo y acorde a la enfermedad es uno de los pilares fundamentales del tratamiento, pues mejora su calidad de vida y, en algunas ocasiones, ralentiza el desarrollo de ese deterioro cognitivo.
Se trata de reorganizar el entorno físico y social “pensado en las personas que conviven con el Alzheimer o cualquier otra demencia, es decir, un lugar que apoya y permite que éstas disfruten de un entorno seguro, vivan dignamente y continúen participando en la comunidad como miembros de pleno derecho”, explica esta asociación especializada.
No obstante, a pesar de que la enfermedad ya esté muy avanzada y los familiares y cuidadores conozcan a la perfección todos los entresijos del Alzheimer, lo cierto es que adaptar el hogar del paciente a esta situación no siempre es tarea fácil, pues son muchos los detalles que hay que modificar y que no debes pasar por alto. Bajo esta premisa, ¿cómo puedes empezar a hacer de tu casa un lugar amigable con el Alzheimer?
Como ya hemos visto en más de una ocasión, el Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa, asociada tradicionalmente a la edad, que sufren en la actualidad más de un millón de personas en España. De hecho, es la causa más común de demencia y eso que entre un 30% y un 40% de los casos todavía no han sido diagnosticados, tal y como asegura la Sociedad Española de Neurología. Ante una incidencia tan alta, es normal que las autoridades competentes quieran ayudar a los afectados a mejorar su bienestar. En este caso, ¿qué cambios debes hacer en tu hogar para que este sea amigable con el Alzheimer?
Bajo este título, el proyecto Euskadi Lagunkoia Sustraietatik (@EuskadiLagunkoi), impulsado por el Departamento de Empleo y Políticas Sociales, publicó hace tan solo unos meses una guía dirigida a las personas mayores o en proceso de envejecimiento que ya presentan algunos signos de demencia, sus cuidadores y su entorno socio-familiar. Este recurso ofrece consejos y recomendaciones sobre los diferentes elementos que componen cada estancia del hogar, así como información sencilla y útil para identificar las necesidades de todas aquellas personas que sufren los estragos de la enfermedad.
Además de la ayuda que proporciona, la Guía para una vivienda amigable se diferencia del resto en que está elaborada desde la perspectiva de las personas con Alzheimer y sus cuidadores. Asimismo, está dividida en varios apartados según las estancias de la vivienda e incluye una sección con propuestas para solucionar los problemas que puedan surgir en el día a día.