Teresa Rey
Preguntas
Watsu o shiatsu en el agua, ¿qué beneficios aporta a los mayores?
El efecto calmante del agua y los masajes ayudan a mejorar la flexibilidad y la autoestima
El watsu hace referencia a la fusión de dos palabras, water que es agua, y shiatsu, una técnica milenaria japonesa que se basa en la presión de distintas zonas del cuerpo. Así pues, la traducción literal de este este método sería shiatsu en el agua. Es por tanto, una técnica de relajación que se aplica en este medio, generalmente en una piscina.
Masajes sin gravedad
Una de las ventajas de este método es que al practicarse en el agua hay ausencia de gravedad, cosa que no ocurre cuando nos dan un masaje en una camilla. El cuerpo permanece sumergido en el líquido mientras el terapeuta aplica una serie de movimientos y masajes.
La ingravidez y movimiento del agua proporciona una sensación de relajación y evasión muy agradables. Este medio permite a su vez que el experto adecúe las posturas a las necesidades corporales de cada persona.
Según lo que sea pertinente en cada caso se realizan estiramientos, torsiones y presiones en lugares estratégicos que provienen de las nociones del shiatsu. Del mismo modo, el watsu actúa como un drenaje linfático, ya que la presión del agua mejora la circulación sanguínea y de la linfa, por lo que repercute positivamente si se tienen problemas de retención de líquidos. En líneas generales, tras una sesión de esta técnica la persona se encuentra más calmada, con la espalda más flexible, las articulaciones descargadas y en ocasiones menos inflamadas.
Ventajas para los mayores
Los terapeutas expertos en watsu aseguran que este método proporciona beneficios interesantes a las personas mayores. Desde un punto de vista psicológico incrementa su autoestima y actitud positiva ante la vida. Además, ayuda a conciliar mejor el sueño, y en ocasiones alivia el dolor de las articulaciones u otras molestias presentes por ejemplo en la espalda.
Los pacientes mayores dicen sentirse más flexibles y ligeros, con una mayor movilidad articular, además de notar una mejoría en la capacidad respiratoria, en la digestión e incluso puede influir de forma positiva si se tiene estreñimiento.
Hay además personas con determinadas patologías que acuden a este método para mejorar algunos de sus síntomas, como ocurre con la fibromialgia, el asma, la EPOC, la parálisis cerebral o también quienes presentan contracturas musculares crónicas, entre otros.
En algunas ocasiones se utiliza para pacientes con síndrome de estrés postraumático o con estrés psicológico y emocional.