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Esperanza contra el cáncer, pero también contra el envejecimiento. Investigadores de la Escuela de Ciencias Biológicas y del Comportamiento de la Universidad Queen Mary de Londres han demostrado que el inhibidor experimental de TOR rapalink-1 puede extender la vida cronológica de la levadura de fisión, un organismo simple ampliamente utilizado para explorar procesos biológicos básicos.

Un estudio publicado en 'Communications Biology' por Juhi Kumar, Kristal Ng y Charalampos Rallis informa que tanto los productos farmacéuticos como los metabolitos naturales pueden influir en la esperanza de vida a través de la vía de la diana de la rapamicina (TOR).

El papel de la vía TOR 

La vía TOR es un sistema de señalización conservado evolutivamente que se encuentra en organismos que van desde la levadura hasta los humanos. Desempeña un papel vital en la regulación del crecimiento y el envejecimiento y está estrechamente relacionada con importantes afecciones relacionadas con la edad, como el cáncer y las enfermedades neurodegenerativas. Debido a su amplia influencia, TOR se ha convertido en un objetivo clave en la investigación antienvejecimiento y oncológica, y fármacos como la rapamicina ya han demostrado su capacidad para prolongar la esperanza de vida saludable en varios modelos animales.

Rapalink-1, el compuesto examinado en la investigación, es un inhibidor de TOR de nueva generación que se está estudiando para su posible uso en el tratamiento del cáncer. El equipo de investigación descubrió que rapalink-1 ralentizaba ciertos aspectos del crecimiento de las células de levadura, a la vez que prolongaba su vida útil. Este efecto parece operar a través de TORC1, el componente promotor del crecimiento de la vía TOR.

Dieta, microbiota y envejecimiento

El estudio identificó inesperadamente un papel importante para un grupo de enzimas conocidas como agmatinasas, que convierten el metabolito agmatina en poliaminas. Estas enzimas parecen participar en un ciclo de retroalimentación metabólica previamente desconocido que ayuda a mantener una actividad equilibrada de TOR. Cuando se interrumpió la actividad de la agmatinasa, las células de levadura crecieron más rápido, pero mostraron signos de envejecimiento prematuro, lo que revela una compensación entre el crecimiento rápido y la supervivencia celular a largo plazo.

El equipo también descubrió que agregar agmatina o putrescina (un compuesto relacionado) favorecía la longevidad de la levadura y mejoraba el crecimiento en condiciones específicas.

"Al demostrar que las agmatinasas son esenciales para un envejecimiento saludable, hemos descubierto una nueva capa de control metabólico sobre TOR, una que podría conservarse en humanos. Dado que la agmatina se produce por la dieta y los microbios intestinales, este trabajo podría ayudar a explicar cómo la nutrición y el microbioma influyen en el envejecimiento", ha afirmado el Dr. Rallis.en un comunicado.

Precaución con la suplementación con agmatina

Rallis ha declarado que los suplementos de agmatina están disponibles comercialmente, pero recalcó la importancia de la precaución: "Debemos ser cautelosos al consumir agmatina para fines de crecimiento o longevidad. Nuestros datos indican que la suplementación con agmatina puede ser beneficiosa para el crecimiento solo cuando ciertas vías metabólicas relacionadas con la degradación de la arginina están intactas. Además, la agmatina no siempre promueve efectos beneficiosos, ya que puede contribuir al desarrollo de ciertas patologías", ha insistido.

Estos hallazgos resaltan importantes conexiones entre la señalización de TOR, el metabolismo y la longevidad. Los resultados podrían ayudar a orientar futuras estrategias que combinen fármacos dirigidos a TOR con enfoques dietéticos o basados ​​en el microbioma en el estudio del envejecimiento saludable, la biología del cáncer y las enfermedades metabólicas.