El vino siempre se sirve por la derecha y sin tocar la copa

Si alguna vez te ha pasado que sin querer has dado un golpe a la persona que te estaba sirviendo el vino porque no sabes por dónde te iba a servir o has tenido una comida en casa y no sabías si poner la guarnición en el centro o llevarla emplatada desde la cocina, debes saber que para todo ello hay un protocolo. Si quieres sorprender a tus invitados o simplemente ser un experto en la materia, a continuación, vamos a darte algunas claves.

¿Cómo servir el vino?

La celebración de cualquier acontecimiento es perfecta para reunirnos con la familia o amigos y disfrutar de un bien vino. Sin embargo, podemos estropearlo si no sabemos servirlo correctamente.

Los vinos siempre deben llevarse a la mesa en posición vertical. Los serviremos por su color, edad y sabor, siempre de menos a más. En cuanto a la temperatura, los tintos oscilarán entre los 16º y 18º, los blancos entre los 7º y 10º, y los rosados entre los 6ºy los 8º, aproximadamente.

A la persona que lo haya elegido, siempre se lo presentaremos por el lado derecho, permitiéndole leer su etiqueta.

El corcho es importante. Lo quitaremos sin explosiones ni ruidos y evitando perforarlo hasta el final. Por ello, una vez extraído lo dejaremos junto a nuestro invitado en un pequeño plato por si desea observarlo u olerlo.

En el caso de los vinos blancos o rosados, colocaremos un cubo con agua y hielo, pero sin llegar a enfriarlo en exceso para que no pierda su esencia. Y siempre acompañado de una servilleta para evitar mojar a nuestros invitados al servir.

A la hora de servir, debemos coger la botella por la mitad y, nunca, apoyar la botella sobre la copa, pero eso sí, a una distancia cercana. Además, evita servir en exceso. Deberíamos llenar la copa por debajo de la mitad de su capacidad. Y recuerda, si cambiamos de vino, es aconsejable cambiar de copa.

¿Cómo servir los platos?

Una vez servido el vino es el momento de los platos.

A la hora de servir la mesa existen varias formas de hacerlo:

• Inglesa: es cuando nos sirven. En estos casos, nos traerán una fuente con la comida por la izquierda y será un camarero o la persona designada la que nos sirva directamente de ahí.
• Francesa: nos servimos nosotros mismos. En este método, un camarero o la persona designada nos traerá también la fuente la cual nos presentará igualmente por la izquierda, pero en este caso, seremos nosotros mismos quienes nos sirvamos directamente de la fuente a nuestro plato. Tanto en el método inglés como en el francés, nunca se utilizan los cubiertos propios, sino que utilizaremos los que vienen en la fuente.
• Simple: en este caso, los platos se preparan y emplatan en la cocina y se sirven directamente terminados a la mesa. Se sirven por la derecha. Es uno de los métodos más utilizados y ello en parte se debe a los cuidados que cada vez más los chefs le dan al emplatado.
• Rusa: es el servicio utilizado cuando hay que flambear, trinchar o hacer alguna preparación especial para un plato. En este caso, el plato se compone en una mesilla auxiliar y se sirve al comensal.

Esperamos que con estos consejos tus invitados se queden boquiabiertos.